La Asociación Trabajadores del Estado (ATE Chaco) se reunió este lunes 27 de septiembre con el recientemente designado presidente del Instit...
La Asociación Trabajadores del Estado (ATE Chaco) se reunió este lunes 27 de septiembre con el recientemente designado presidente del Instituto de Cultura, Francisco Romero. El funcionario, que vuelve a hacerse cargo de la cartera cultural provincial luego de su mandato en 2008, recibió a los representantes sindicales con el fin de trabajar en pos de resolver los reclamos históricos que aquejan al sector.
El
Instituto de Cultura se encuentra entre los organismos con mayor cantidad de
trabajadoras y trabajadores precarizados. Y los sueldos de las y los
trabajadores de planta figuran entre los más bajos de la provincia.
En
2019 y en 2020 las y los trabajadores culturales mantuvieron medidas de fuerza
por alrededor de dos meses de forma continuada. En ese primer año se conquistó
el pase a planta de más de 60 compañeras y compañeras y el incremento de los
contratos, y producto de la lucha del año pasado se consiguió unificar la
modalidad de contratación, un incremento para precarizadas y precarizados, y
bonificaciones para aquellas y aquellos trabajadores que nos las percibían.
Romero
fue el primer presidente del Instituto de Cultura, hecho del cual han pasado
más de diez años. En ese tiempo la planta del organismo se duplicó, pero al día
de hoy más de la mitad del personal tiene que vivir con menos de 30 mil pesos
al mes
“En 2020
millonarias sumas de dinero fueron destinadas a mejoras en los edificios y al
acompañamiento de artistas y hacedores durante la pandemia, lo cual nos parece
perfecto, pero se descuidó a las y los trabajadores que día a día llevan
adelante las políticas públicas y eso es inaceptable”, expresó el secretario
General, Mario Bustamante.
Ante
esta situación, ATE Chaco planteó el siguiente pedido: al menos 10% de
recomposición salarial para los trabajadores y trabajadoras de planta
permanente, recomposición de los contratos de trabajadoras y trabajadores
precarizados de modo que no quede ninguno por debajo del Salario Mínimo Vital y
Móvil establecido en el Consejo del Salario en $32 mil para octubre, sostener
el pago de horas extra en los casos actuales, impulsar la carrera del trabajador
y la trabajadora de Cultura para permitir el desarrollo personal y profesional
de la planta de personal del Instituto, garantizar condiciones adecuadas de
seguridad e higiene en los ámbitos laborales, regularización y estabilidad para
los trabajadores y trabajadoras del ICCh que implementan en territorio las políticas
culturales provinciales, y la vuelta a la presencialidad coordinada y
consensuada con los trabajadores y trabajadoras por medio de sus representantes
sindicales, de acuerdo a las recomendaciones vigentes.