El secretario General de ATE Chaco Mario Bustamante y la secretaria de Administración Andrea Azzetti se reunieron, en la tarde de este jue...
El
secretario General de ATE Chaco Mario Bustamante y la secretaria de
Administración Andrea Azzetti se reunieron, en la tarde de este
jueves, con la vicegobernadora Analía Rach Quiroga y la secretaria
de Derechos Humanos Silvana Pérez para evaluar y abordar de manera
conjunta una solución definitiva a la situación de violencia
laboral, psicológica y persecución política, agravada por razones
de género, que ejerce el intendente de Corzuela Rafael Carrara
contra cuatro trabajadoras municipales, nucleadas en el sindicato.
“Solicitamos
intervención del Ejecutivo provincial, porque entendemos que la
violencia que ejerce el intendente contra las trabajadoras excede a
lo netamente sindical, si bien se da en el marco laboral, utilizando
y hasta extralimitándose en la autoridad que como patrón del
Municipio tiene sobre ellas, hay un claro ensañamiento político y
de género contra las compañeras”, explicó Bustamante.
Por
ello, luego de realizar las presentaciones y denuncias
correspondientes, tanto en el Municipio como en la oficina de
violencia laboral de la Secretaría de Derechos Humanos, el sindicato
solicitó la intervención del Ejecutivo provincial a través la
vicegobernadora de la provincia. “La vicegobernadora se comprometió
a acompañar el reclamo y articular todas las acciones necesarias
para frenar la violencia institucional que Carrara, junto al equipo
que le responde, ejercen sobre las trabajadoras, violencia que les ha
causado un enorme daño emocional y psicológico, además de
económico”, indicó.
Se
trata de cuatro trabajadoras municipales de Corzuela representadas
por la delegada Gisela Lorena Íbalo, que vienen sufriendo el
hostigamiento, la persecución política, laboral y violencia
económica desde 2015, pero la situación se agravó a fines del año
pasado luego de que el intendente Carrara resultara electo en las
elecciones Municipales en las que las trabajadoras apoyaron
públicamente a otro candidato.
A
parir de allí, les negó el ingreso al edificio municipal donde
cumplían funciones, y las trasladó a los lugares más inhóspitos a
cumplir horas, sin ninguna otra función, más que padecer las falta
de condiciones dignas que la ley establece que se deben garantizar a
todo trabajador y trabajadora. Un galpón con desechos y basura,
donde a una de ellas le picó un alacrán; el cementerio, lejos del
centro de la ciudad, donde solo hay un baño a una cuadra en una zona
insegura y sin acceso de transporte público donde padecieron hechos
de inseguridad; y ultimamente las obligó a cumplir horas en un
banquito en el patio del Municipio, a la intemperie con bajas
temperaturas y ante una pandemia por coronavirus.
“Con
una actitud paternalista y patriarcal las puso en penitencia por
apoyar la candidatura de otro candidato, con total impunidad e
irresponsabilidad, en plena pandemia por coronavirus, cuando más
tenemos que proteger la salud y la capacidad de los hospitales y
centros de salud, las obliga a cumplir horario, sin funciones, al
aire libre con temperaturas muy bajas en la intemperie exponiendo su
salud”, remarcó.
Como
si fuera poco, ante la exposición pública de la situación por las
redes sociales, el castigo fue sacarles el banquito, y las compañeras
hoy se tienen que sentar en el piso a esperar que el tiempo pase para
volver a su casa, para
conservar el empleo del que ya fueron amenazadas que serán
despedidas luego de la pandemia. “Todo este accionar violento es
ejecutado y sostenido también en complicidad de varios colaboradores
que las difaman, agreden, insultan y amenazan constantemente al punto
en el que no quieren ni pueden andar solas”, explicó.
Además,
a dos de ellas les quitó la recategorización ejerciendo también un
daño económico, de manera totalmente arbitraria e ilegítima.
“Utiliza el poder de turno para dañar moral, psicológica y
económicamente a mujeres que están en una situación de
inferioridad es violencia de género, de la peor, de la que hablamos
cada vez que decimos Ni Una Menos, de la tenemos que erradicar”,
concluyó el secretario General de ATE.